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Efectos realistas
He hablado de la moral y un poco del efecto de lanceros contra caballería. Pero todo el juego es así. Si colocas unidades delante de tus arqueros, quizá algo de fuego amigo las dañe, tus arqueros serán menos eficaces en los bosques que a campo abierto. Lo mismo sucede con la caballería. Si estas arriba y el enemigo abajo, los enemigos llegaran más cansados al combate y serán algo mas débiles. Con lluvia los arqueros son menos eficaces, una carga es eficaz, pero una vez perdido el impulso de la carga los caballos son vulnerables en combate cerrado.
Casi cualquier cosa que uno pueda pensar que afectaría en una batalla esta tenida en cuenta. Realmente impresionante ver y dirigir una batalla en estas condiciones.
Campaña
Esta claro que el punto fuerte del juego son las impresionantes batallas, y su manejo táctico. Pero el juego tiene más. Un modo de campaña en el que tendremos que dominar Europa, el norte de África y Oriente Próximo. Nuevamente ya sonará a los que conozcan la saga (sobre todo Rome Total War) pero si no es así lo explicaré brevemente.
Sobre un mapa dividido en provincias tendremos que mover nuestros ejércitos y agentes. El uso de los ejércitos es más o menos evidente y estará basado en defender nuestras provincias de incursiones enemigas o adquirir nuevas provincias para nuestro imperio. Pero no es sólo eso lo que tendremos que hacer en el juego.
Cada provincia tiene una ciudad que será la que determine quien es el dueño de la provincia, aquel que controle la ciudad controlara la provincia. Y la ciudad de esta provincia podremos construir diferentes edificios. Estos edificios nos darán diversas ventajas y permitirán el entrenamiento de diferentes tropas. Con el tiempo lo normal es especializar provincias. En una tendremos todos los edificios para un tipo de tropa, en otra provincia otro tipo de tropas y así hasta que podamos hacer tropas de elite en las provincias claves, eso sale más rápido que tener todos los edificios en cada provincia. Además permitirá que en otras provincias se mejoren infraestructuras o comercios para que nuestro imperio no entre en números rojos.
Fidelidad y revueltas
Hay que tener en cuenta que las provincias no siempre estarán contentas con nuestro gobierno. Un exceso de impuestos puede causar revueltas. Así que a veces habrá que tener tropas estacionadas en ellas sólo para evitar el descontento, o invertir en edificios que mejoren el orden público, o asegurarse de que su religión coincide con la oficial. O estacionar en ella un general o miembro de la familia que sea buen gobernante. Muchas y variadas soluciones a las que tendremos que hacer frente.
Y todas tienen consecuencias. Si estacionas tropas, son tropas que no podrás mover, ya que si las usas para otras tareas la ciudad estallará en revueltas. Idéntico caso ocurre con un general parado. Construir edificios no tiene estas pegas, pero al mismo tiempo no deja defensas en la ciudad, y los enemigos pueden verla como una conquista atractiva. Encontrar el equilibrio es parte del atractivo de este juego.
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