Kingdom Under Fire

El juego nos pone al mando de una serie de tropas divididas en batallones como en la mayoría de los juegos de estrategia (infantería, lanceros, arqueros, catapultas, caballería, etc.). Cada batallón es en si un grupo de personas al momento de controlarse y no unidades individuales. Estos batallones son personalizables, se les puede mejorar su armamento y defensa (armadura y escudos) y a su vez subir de clases (los arqueros resultan luego "mortars", y la caballería liviana en caballería pesada). Para lograr estas mejoras es necesario obtener en batalla puntos de experiencia que luego se usan para mejorar el batallón o a su comandante de tropa (es necesario mejorar a ambos ya que las habilidades del comandante mejoran las opciones de evolución de la tropa). Una vez en batalla el grupo de soldados que forman el batallón tiene varias opciones de acción en cuanto a su función: el ataque normal para el que están destinados (Ej.: los arqueros pueden lanzar flechas en diferentes rangos de amplitud), acciones especiales (Ej.: los arqueros pueden lanzar flechas incendiarias sobre los bosques o disparos directos de corto alcance) y acciones secundarias (Ej.: los arqueros pueden entrar en batalla con espada y escudo pero dado que no es su función su nivel de ataque y defensa cuerpo a cuerpo es muy pobre). Este esquema se repite en todos los batallones: acción principal, acciones especiales y acciones secundarias en batalla.

Destaca la rama de evolución de las tropas y tecnologías en las que se pueden convertir, de simples tropas de a pie al final podremos usar catapultas, balistas, cañoneros o globos dirigibles pesados para dominio aéreo y bombardeo.

La particularidad la recibe la tropa de infantería, en esta está el personaje que elegimos para jugar. En la tropa de infantes cuando batallamos usamos al personaje elegido en forma particular como si fuera un beat-em-up. En el mismo nuestro personaje tiene dos golpes disponibles, defensa, combos, y movimientos basados en magias y golpes especiales.

Hasta aquí el juego cumple perfectamente. Los problemas empiezan a la hora de jugarlo…

Por la parte del juego de estrategia el problema esta en la cámara y control de tropas como unidad de batalla. Resulta que el cursor es tremendamente engorroso de mover y centrar en una posición, requiere tiempo para precisarlo y en algunas campañas ese tiempo es la diferencia entre ganar o perder la batalla. Se suma que la cámara ayuda menos, al momento de dar una orden de movimiento la cámara se sitúa por detrás de las tropas que se mueven y, por decirlo de alguna manera, se estanca en esa posición hasta que termine el movimiento. Si por necesidad tenemos que dar una contraorden de movimiento hacia el lado contrario de donde nos movemos es casi imposible lograrlo con velocidad, ya que la cámara no nos deja dar vuelta el cursor para apuntar al lado contrario porque por cada paso se auto centra en la espalda de la tropa. La opción para dar esa contra orden es cancelar el movimiento que hacíamos (orden de parar), esperar que esta se cumpla (todas las ordenes tienen cierto tiempo requerido para cumplirse) y luego centrar la el cursor de movimiento (que es impreciso y también tarda) en el nuevo destino. Estas acciones ya de por si nos requieren mas de cinco segundos mientras el resto de tropas están en plena batalla. Con el tiempo se aprende a usar el movimiento de la cámara y ordenes sucesivas para evitar tener que estar en esta mala situación.

Otro tema es el desarrollo de las misiones, por un lado las tropas tienen buenas opciones de juego, pero en si el esquema de misiones al que debemos acudir no es totalmente convincente. Se trata de misiones con poca posibilidad de variables fuera de la estrategia que el juego recomienda a través de los generales de tropa y consejeros de batalla, y que nos obliga a repetir muchas veces el mismo esquema de batalla porque una innovación es de tal riesgo que es muy seguro que no tengamos posibilidad de ganar. Además no es muy entretenido el esquema de batalla y las misiones no resultan muy divertidas por el poco margen de error que se nos da.

Por el lado del juego Beat-em-up no hay muchas quejas, a lo mucho se puede considerar que es un juego simple sin demasiadas opciones de combos o golpes… pero tampoco se le puede pedir mas porque en definitiva el juego no es un Beat-em-up sino un juego de estrategia que incluye una opción secundaria, a la cual no es necesario recurrir si o si para ganar una batalla.