Slam Land

En Slam Land deberemos ofrecer a los dioses unas ofrendas para llegar a lo más alto del cielo. Dependiendo del modo de juego, las ofrendas pueden ser objetos, o nuestros propios rivales (3 competidores, ya sean IA o jugadores). De esta forma nos desplazaremos por pequeños escenarios con visión lateral. El escenario se podrá ver completamente en pantalla, pero un zoom nos acercará a la acción si los personajes se juntan. Nadie se perderá en la pantalla, exceptuando cuando la propia acción nos confunda. Los gráficos están creados a mano, con esa sensación de jugar con títeres dibujados en un papel y que luego han sido recortados. Lo mismo pasa con los escenarios, creados como un pequeño teatro, que en ocasiones se irá moviendo con piezas recortadas.

La música no está a un gran nivel, con melodías excesivamente repetitivas y estridentes. Los efectos de sonido por su parte acompañarán a la pirotecnia al ofrecer las ofrendas. Con explosiones y una voz en off aumentará la espectacularidad del momento anunciando los multiplicadores de puntos.

Conclusión

Las combinaciones como decía al inicio a veces salen bien y otras salen mal, peo siempre al gusto del consumidor. En esta ocasión nos encontramos con un juego con mecánicas simples, que presenta problemas al agarrar a nuestro adversario. Esto le pasa factura al ser los combates un poco al azar y eso que no dependemos de un servidor online. Es un juego para tardes con los amigos, con hasta 4 jugadores que pueden jugar en formato local. Para un solo jugador le falta profundidad, variedad de escenarios, situaciones que cambien el ritmo de juego, y un modo historia no le habría sentado nada mal, además de un pequeño tutorial, más allá de enseñarnos a usar los dos botones. Si tienes amigos competitivos, ha llegado tu momento de machacarlos y ofrecerlos a los dioses.

Puntuaciones

Gráficos: 5.0

Sonido: 5.0

Jugabilidad: 6.0

Duración: 5.0

Multijugador: 5.0

Historia: 0.0

TOTAL: 5.5