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En el apartado de armas tendremos, como es costumbre, cientos de
armas de distintos tipos, a los que se le añaden las nuevas y letales
armas láser y las de un nuevo elemento: tipo hielo. Las armas de hielo,
podrán congelar y detener por un pequeño tiempo a nuestros enemigos más
feroces, así como causar daño por frío (obvio). Dentro de nuestro
arsenal sobre ruedas, contamos con un nuevo vehículo: una moto
planeadora, con la que podremos incluso saltar sin necesidad de rampas.
 Como
es de esperar los nuevos aventureros disponen de sus propios árboles de
habilidades, como viene siendo habitual en la serie y uno de los puntos
más divertidos, aportando al juego de cierta profundidad. Algunas de
las habilidades de nuestros héroes son bastante similares a las vistas
en otras entregas... otras no tanto. Armas duales, bots para ayudarnos
en batalla, escudos que detienen balas, a la par que rebanan cabezas,
son sólo una pequeña muestra de las habilidades que tendremos a nuestra
disposición.
Mención aparte se merece las habilidades del
Claptrap. La habilidad del Claptrap es una mezcla de habilidades y
cuando la usemos, será totalmente aleatoria cuál se ejecutará, algunas
muy útiles... otras no tanto. Lo que está claro, es que con este
personaje en nuestro equipo, las risas estarán aseguradas.
Pandora, más bonito que Elpis
Gráficamente
usa el mismo estilo que sus predecesores aunque no tan estable. Sin ser
juegos que destacasen en lo gráfico, el estilo y colorido hacían de
Borderlands algo diferente al resto. Este Borderlands The Pre-Sequel
está un peldaño por debajo de sus predecesores, no por que sea más “feo”
si no por las caídas de frames en los momentos de más carga gráfica,
algunas texturas de bajísima calidad y resolución, inclusive, problemas
de carga de las mismas, un popping más acusado que en Borderlands 2. En
general es inferior a su (pre) secuela.
 La música que nos
acompaña mantiene el buen nivel de los anteriores juegos, pero en lo que
destaca realmente el juego es en sus doblajes. El nivel y calidad de
las voces es altísimo y los diálogos igual de hilarantes, de los cuales
no deberemos perder detalle, no tienen desperdicio.
Jugablemente
es casi un calco que los anteriores. La misma fórmula pero con la
vuelta de tuerca que suponen los saltos y la ausencia de gravedad,
haciendo que los combates tengan un plano más vertical que en los
anteriores.
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