SONIDO
La banda sonora del juego es un poco precaria, sin duda lo peor de este Graffiti Kingdom. Sin llegar a ser exactamente mala, las melodías son demasiado sencillas y con poca enjundia en general. Se han utilizado cancioncillas desenfadadas que no desentonan con el resto del juego.

Lo mejor del apartado sonoro es sencillo el buen doblaje en inglés. Los actores actúan bastante bien y sólo en algunas ocasiones se nota que algo no empasta demasiado bien. El juego que nos distribuye Proein en España viene con el doblaje en inglés, pero con los textos traducidos a nuestra lengua.

JUGABILIDAD
Graffiti Kingdom es especial por ciertos matices, y estos se encuentran claramente en la jugabilidad. Lo primero que choca a simple vista es que el personaje principal, el príncipe Píxel, no lleva sobre la espalda una preciosa espada con incrustaciones de piedras preciosas, sino una simple paleta de colores. El juego tiene el sistema de juego de un Action-Rpg. Aunque a estas alturas  seguro que ya sabéis lo que significan estos términos (creo que antes ya lo he explicado para los más despistadillos), un Action-Rpg se caracteriza por disponer de luchas en tiempo real, es decir, vemos a los enemigos en el mapeado y los zurramos como podemos o huimos despavoridos con la cola entre las piernas.

Volviendo a la paleta de colores que empuñaremos como arma, vamos a intentar explicar su funcionamiento, que es muy fácil. Por un lado podremos pegar una especie de garrotazo que provocará un destello similar al de una varita mágica. Ahora bien...¿Para qué sirve? Muy fácil, gracias a este movimiento mágico podremos absorber y transformarnos temporalmente en el enemigo (con todas sus habilidades y sus poderes). Las capturas son limitadas, así que apáñatelas para que te sobren por si te metes en líos.

El transcurso del juego es completamente lineal. La mayoría de las fases tiene elementos plataformeros y por supuesto enemigos finales esperando. La interacción con el entorno será esencial. Por ejemplo en un momento del juego tendremos que helar un pequeño lago para poder pasar sobre él y allanar el camino.
Como en todo RPG, Píxel irá subiendo de nivel y ganando nuevas habilidades a medida que va avanzando el videojuego.

Otra de las cosas interesantes es la colección de cartas. De vez en cuando al derrotar algún enemigo, éstos liberarán una carta. Con estas cartas podremos añadir nuevos atributos a nuestras creaciones.

¡A dibujar se ha dicho!
Sin duda lo más interesante del juego. En los puntos de guardado podremos acceder a un enorme editor de personajes. Con esta herramienta jugable podremos ir mejorando, cambiando, o creando a nuestro antojo nuevos monstruos. Al principio del juego no podremos utilizar todas las opciones del editor, pues deberemos ir subiendo de niveles para que se vayan activando las opciones. En un primer momento no es muy fácil hacer cosas bonitas. Yo mismo he vuelto a decidir que lo mío definitivamente no es dibujar. Tras crear unas chirimoyas con formas de abominaciones dejé claro que mi calidad de dibujante es precaria. En fin, espero que tengáis más suerte que yo al dibujar.

Además del modo historia hay otro modo. En el modo adversario deberemos luchar contra un enemigo final, bien controlado por la CPU o bien controlado por un amigo. Poco más se puede decir.

ÚLTIMOS COMENTARIOS
Graffiti Kingdom es una apuesta original. Está orientado sobre todo  hacia un público infantil, pero tiene elementos que ofrecen enormes posibilidades jugables. No es de extrañar que en el futuro podamos ver una nueva entrega. Los habituales del género rolero seguramente no lograrán disfrutar plenamente de esta aventura debido a su escasa dificultad. Pocas veces se muere uno y atascarse mucho menos.

LO MEJOR
- Los más peques de la casa lo pasarán en grande
- Una apuesta original

LO PEOR
- Gráficamente sencillo
- La banda sonora no es nada del otro mundo

Puntuaciones

Gráficos: 6.7

Sonido: 6.4

Jugabilidad: 8.5

Duración: 8.0

Multijugador: 5.5

Historia: 6.5

TOTAL: 7.0